Tyson Fury: “Aquí me
discriminan; me voy a Estados Unidos”
De Lester Jiménez | Contra las cuerdas –
Cansado de recibir críticas cada vez que abre la
boca, el campeón británico de los pesos pesados, Tyson Fury, aseguró esta
semana que su revancha frente a Wladimir Klitschko del próximo 9 de julio será
su último combate en su natal Reino Unido.
Fury (25-0, 18KO’s), quien proviene de una familia
de gitanos de extensa tradición, dijo que se mudará a Estados Unidos luego del
combate frente a Klitschko (64-4, 53 KO’s) porque supuestamente es discriminado
en su propia tierra.
“No soy aceptado en este país. Soy un gitano,
punto. Siempre seré gitano y no voy a cambiar. Siempre será gordo y blanco. Ya
está”, dijo el monarca de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), Asociación
Mundial de Boxeo (AMB) y la Organizació n Internacional de Boxeo (OIB) a la
prensa británica durante una conferencia de prensa en Manchester.
“Me voy a Estados Unidos, donde la gente tiene una
mejor vida. Tomé la decisión la semana pasada de mudarme a un lugar donde la
gente admira el éxito. Los estadounidenses disfrutan la forma agresiva en la
que hablo, así que ¿para qué me voy a quedar en un lugar donde a nadie le gusta
lo que haces? ¿Por qué no ir a un lugar donde me acepten y les guste? Estoy
hecho para América”, sostuvo.
Desde que Fury destronó a Klitschko de sus títulos
pesados en noviembre pasado en Alemania, ha estado en la candela pública por
sus abrasivos comentarios, entre los que se destaca comparar al homosexualismo
con la pedofilia.
“Hay solo tres cosas que se deben consumar para que
el diablo entre a tu casa: una es legalizar la homosexualidad, otra es el
aborto y otra es la pedofilia”, dijo en una entrevista en el 2015.
También condenó públicamente el aborto, dijo que
ahorcaría a su hermana si fuera promiscua y pidió que legalizaran el dopaje en
el deporte. Como si fuera poco, fue duramente censurado por sus declaraciones
en torno al rol de la mujer en la sociedad.
“Para mí, el mejor lugar de una mujer es en la
cocina y acostada. Que me haga una buena taza de té. Esa es mi creencia
personal”, expresó en una ocasión.
Su justificación es simple: es gitano y sus
creencias son distintas a los del resto de la sociedad británica.
Como era de esperarse, sus comentarios causaron una
ola de críticas en todo el país y desde entonces, no le han quitado el guante
de la cara.
De ahí que el martes, en medio de la conferencia de
prensa para promocionar su pela frente a Klitschko, anunció que se marchaba del
país.
“La pelea con Klitschko va a ser mi última en Reino
Unido. Probablemente me vaya a Los Ángeles y pelearé en Nueva York o Las Vegas.
Allá recibiré más cariño que el que me dan aquí”, insistió.
El campeón mundial de los pesos pesados Vladimir
Klitschko, izquierda, y el púgil británico Tyson Fury se miran cara a
caradurante una conferencia de prensa en Londres el 23 de septiembre del 2015.
Klitschko anunció el viernes que se retira de su defensa del contra Fury el 24
de octubre a causa de ua lesión. (Foto AP/Frank Augstein)El campeón mundial de
los pesos pesados Vladimir Klitschko, izquierda, y el púgil británico Tyson
Fury se miran …
¿SERÁ CIERTO?
Resulta curioso que el anuncio de su supuesta
mudanza se realice en medio de la conferencia de prensa para promocionar su
revancha frente al ucraniano.
Como ha sucedido en otras instancias, en peleas de
gran envergadura hace falta un héroe y un villano. ¿Habrá una mejor manera de
crear una figura antagonista que despreciar el lugar donde se presentará, compararlo
con un lugar que supuestamente es mejor y asegurar que no volverá a pisar ese
sitio?
Mientras, la figura del héroe, en este compromiso,
recae en el ucraniano, de físico trabajado, cuidadoso en sus expresiones
públicas, educado y que por años fue el referente en el peso máximo del boxeo.
Por eso, Klitschko aseguró que los propios ingleses
le han pedido que acabe con Fury por la vía rápida el próximo 9 de julio.
“Es una vergüenza para el boxeo tener un campeón
mundial como él”, dijo Klitschko al diario Daily Star.
“Hasta los fanáticos británicos quieren que pierda.
La otra noche estuve en el partido de fútbol entre Manchester City y Real
Madrid y cientos de fanáticos me pidieron que lo noqueara. Una victoria de mi
parte le devolvería el respeto al boxeo”, añadió.
Lejos de dejar que sus palabras afecten su carrera,
parece que Fury y sus promotores tratan de sacarle provecho a su polémica
imagen para despertar pasiones en los fanáticos, aunque sea en contra.
Y es que, luego de sus constantes críticas, podría
ser un riesgo celebrar una pelea en Manchester, donde se supone que sea el
boxeador local, y que no reciba el respaldo del público.
Fury fue más lejos al expresar que no siente
ninguna pasión por el boxeo, salvo el dinero.
“Odio el boxeo. Pero soy demasiado bueno para
detenerme ahora y dejar de ganar esta cantidad de dinero”, dijo en la misma
conferencia de prensa. “¿Para qué dejar de pelear si es dinero que gano fácil
noqueando personas? Pero no lo disfruto”.
Hay que asegurar fanáticos y la antipatía, al igual
que la empatía, también mueve la boletería en el boxeo.
Por otro lado, de ser ciertas las amenazas de Fury
de que se mudará a Estados Unidos, podría ser interesante ver si esa movida
facilita un posible encuentro de unificación de títulos frente al campeón del
Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Deontay Wilder, el primer estadounidense en
conquistar un título mundial de pesos pesados en los últimos nueve años.
De seguro sería una pelea muy lucrativa.
Pero antes, tendrá que pasar la prueba del 9 de
julio.
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