Y se nos fue Luis
Mariano
En los 60 el “Canchunchu
Florido” era un oasis de artistas, poetas, músicos y bohemios errantes
..."Porque yo soy un cantor que solo busca en
el verso cantar las cosas sencillas que tengan sabor eterno", afirmaba
este gran creador popular, que fue declarado Patrimonio Cultural Viviente del
estado Sucre en 1994. Falleció el 15 de marzo de 2002, a los 95 años de edad
Armando Solórzano
Conocí a Luis Mariano con apenas 16 años traigo al
recuerdo mi búsqueda de su residencia de paso por Carupano al Oriente del país,
donde me aparto del grupo, para cumplir mi misión.
La Anécdota la inicio con mi 1er contacto a las
puertas de su residencia con un personaje llamado Freddy Best amigo de la casa
y quien al abrir y luego de analizar mi aspecto, me pregunta ¿y tú qué haces,
cantas, bailas, tocas algún instrumento), pues no, le dije, escribo versos y
compongo canciones, luego oiría que me anunciaba, Mariano allá afuera esta un
Hippie poeta, que quiere conocerte,
accedió y así participe en una tertulia de altura amenizada con música y
chistes, fue todo muy grato y durante 2 días le conocí podría decir que bien en
su lado humano y sociable.
Mucho tiempo después en el año 88 (fecha de las
fotografías) me reencontré con Freddy Best, quien resulto ser, hermano de Armando Best, una estrella de
nuestro pugilismo, trabajando como periodista en La Corporación Casa, durante
la presidencia del señor Lorenzo Tovar.
Best me propone entonces, al recuerdo de nuestras
“andanzas” y dada mi confianza con el jefe, que le proponga hacerle una visita
a Don Mariano y llevarle algunos regalos, cuestión que Lorenzo Tovar, hombre
solidario acepto sin vacilar y así, viajamos nuevamente al Canchunchù Florido.
Allá en Carúpano el tiempo parecía detenido, la
misma hospitalidad, las mismas sonrisas, el mismo cálido paisaje dentro y fuera
del caserón idílico.
Todo un día de charlas y recuerdos, risas con las
ocurrencias de Don Mariano al recibir algunos presentes, incluso el ramo de
flores, que se empeñaron las mujeres en comprar.
Ese evento me quedo grabado para siempre y cada 19
de agosto; hoy 110 años del Natalicio de
Don Luis Mariano Rivera Font, poeta, cantor, compositor, y uno de los más
grandes cultores populares de Venezuela, quien era hijo natural de un rico
comerciante de Carúpano, Antonio José Font, de ascendencia corsa y de María
Rivera, una campesina analfabeta, traigo a la memoria el haber conocido y
tratado, a un insigne venezolano, de lo cual me siento orgulloso.
Luis Mariano, nació en 1906 en un humilde hogar
campesino en el valle de Canchunchú Florido, en las afueras de la ciudad de
Carúpano, en el estado Sucre.
Huérfano de madre a muy temprana edad, tuvo que
afrontar una niñez de pobreza y muchas dificultades lo que lo obliga a irse a
vivir con su abuela materna y su tía, dedicándose a las labores agrícolas.
Semi analfabeta, aprendió a leer y escribir a la
edad de 38 años cuando decide continuar su formación educativa de forma
autodidacta, luego de un incidente de vergüenza, cuando un error ortográfico en
un anuncio que escribía, provoco hilaridad en unos niños, sólo había aprobado
hasta el tercer grado de primaria, y siendo un adulto comienza a componer
canciones inspiradas en su terruño oriental, en los personajes de su pueblo, en
las aves, las flores, las frutas y los animales, sentado en su patio, decía que
podía escuchar el parafraseo de la naturaleza.
Dotado de una extraordinaria sensibilidad para la
música y los versos sencillos, en 1963 funda la agrupación musical
"Canchunchú Florido" que lo haría conocido más tarde en todo el país.
y el pueblo. Su música ha recorrido casi toda la
América y otros continentes y ha sido difundida por diversos artistas
nacionales e internacionales...Entre sus composiciones más conocidas están:
Canchunchú florido, Cerecita, La Guácara, Florecita, Juana Francisca, Mi comae
Juana María, El Foforifo, El Guareque y El Sancocho, entre otras, interpretadas
en su mayoría por la extraordinaria voz de otro sucrense, Gualberto Ibarreto
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